Cuando nuestros jóvenes viajan a cualquiera de las casas de acogida a las que Amics del Nepal da soporte, siempre se guardan un tiempo para charlar con los niños y adolescentes para ver cómo se sienten, qué necesidades tienen mientras todos juntos intentan ver si hay cualquier problema. Crecer en una cas de acogida puede a veces resultar difícil para los niños y es importante hablar i intercambiar experiencias para que los niños descubran otras realidades y puntos de vista.
Al final del día, después de cenar y de las actividades siempre guardamos un rato para sentarnos todos juntos en círculo y ver si en el grupo hay preocupaciones así como compartir con ellos experiencias de vida de Kathmandu y como es estudiar en la capital.
Es un espacio de intercambio y para compartir, en el que poco a poco los niños pueden encontrar la manera de expresar sus sentimientos y opiniones mientras hacer crecer su confianza en sí mismos y descubren un camino para decir lo que piensan.
